Hablamos de ISO y WB, Balance de Blancos, que aunque es un tema que para algunos es de iniciación a la fotografía, nosotros recibimos muchas dudas al respeto. Así que decidimos hacer un podcast para resolver dudas y hablar de cómo tratamos nosotros el tema.
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¿Qué es el ISO?
El ISO es la sensibilidad a la luz de nuestro sensor. Y podemos configurar la cámara según necesitamos captar más o menos luz. Como más subimos el ISO, más luz captamos. En situaciones de poca luz, tenemos que subir el ISO de nuestras cámaras. Pero tenemos que tener en cuenta que como más forzamos el ISO, menos calidad tenemos en la imagen.
Con la nueva tecnología tenemos más ventajas. Hacer fotografías es más fácil. Pero con el tema de los ISO nos hemos vuelto locos. Ya que si no hay luz, NO HAY LUZ. Por mucho de que tiremos de ISO, si no hay luz la fotografía no puede salir sin grano.
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Si no hay luz, no hay foto ni hay nitidez.
Como más ISO, menos información pero más visión. Es decir, se pierden cantidad de pixeles y por tanto calidad, aunque la cámara puede captar a menos luz.
ISO y Stock
Los stockeros debemos tirar sin ISO. Las agencias nos van a rechazar todas las fotografías que tengan grano. Pero no nos volvamos locos. Podemos tirar a ISO relativamente grande, podemos tirar a 1000 ISO tranquilamente. No tengáis miedo, se puede tirar. Nos referimos a que no debemos forzar excesivamente las cámaras.
Nosotros os aconsejamos tirar entre 100 y 600 ISO. Y para la foto nocturna, aconsejamos la ayuda de un trípode para poder tirar a velocidades más bajas y no forzar tanto el ISO. Hablamos siempre de Stock! Obviamente para fotografía artística o si la intención es buscar grano en las imágenes como un efecto expresivo, hay total libertad. Pero teniendo en cuenta que las agencias de stock quieren imágenes limpias de grano.
Balance de Blanco WB
El Balance de blancos es comparable con la película de antes. Kodak o Fuji eran las más conocidas. El rollo de película que se cargaba a la cámara. Podías escoger los carretes según el tono que querías dar a las fotografías. Kodak, por ejemplo, trabajaba con tonos más cálidos.
Unos daban tonos más azulados, o más verdosos, más cálidos o más fríos.
Según el carrete, todas las fotos tenían el mismo tono. Eso equivaldría al balance de blancos. Nosotros escogemos qué tonalidad de luz queremos. Si yo quiero utilizar la máquina con una luz muy anaranjada o poco constante, utilizamos un WB manual: escogiendo siempre qué grado queremos de tonalidad.
No es la misma temperatura de luz un tungsteno o un fluorescente. El color de las imágenes cambia radicalmente.
Trucos para el Balance de Blancos WB
Tenemos que poner la cámara en la temperatura de color acuerde al sitio donde estamos tirando. No nos podemos fiar de editar el Raw después, ya que siempre pierde calidad. Si se puede ajustar con la edición, pero no rectificar del todo.
La manera más fácil es clavar el balance de blancos es llevar siempre un folio blanco puro, lo pones debajo la luz donde tiramos y le decimos a la cámara que ESO es el blanco. Le indicar qué es blanco y a partir de ahí tienes el tono real de lo que estás enfocando.
En definitiva son parámetros de la cámara que debemos controlar. Como más controlemos, más controlaremos el resultado final de nuestras fotografías que queramos conseguir.
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