Hoy hablamos de algo que nos preguntáis a menudo: cómo hacemos para planificar nuestras sesiones de fotografía. Siempre repetimos que la planificación es algo absolutamente necesario.

La planificación es importante. No podemos improvisar, perqué eso provoca que saquemos muchas fotos innecesarias y perdemos el tiempo.  Es verdad que cuando tenemos más experiencia, vamos más directos a hacer lo que tenemos en mente.

¿Cómo se planifica?

El concepto​

En primer lugar pensamos una idea: un concepto, algo que se nos ocurre y que sabemos que podemos hacer una sesión de esta idea.

Pensamos una fecha y empezamos a pensar en cómo podemos desarrollarla. Con una libreta, vamos pensando en cómo representaremos ese concepto y ahí iremos apuntando todo lo que necesitamos: herramientas o disfraces, colores a usar… apuntamos todo lo que vamos a comprar y las ideas que nos van surgiendo.

A la vez, esto irá acompañado de tener clara una ubicación donde realizarlo. Está claro que la localización estará estrechamente ligada al concepto.

Cuando tenemos todo pensado, dedicamos un día a hacer la compra, buscando algo asequible pero que nos sirva y se ajuste a aquello que hemos pensado.

El cuaderno​

Una vez tenemos todo, nos dedicamos a pensar la sesión. Normalmente nos pasamos un rato frente al cuaderno pensando en posibles fotografías, escenas o acciones que queramos realizar. Pensar en los modelos que vamos a usar: niños, adultos, grupo… Todo eso lo dibujamos en esbozos rápidos y esquemáticos en el cuaderno.

De esa forma tenemos claro cómo vamos a dirigir a los modelos y no vamos a perder el tiempo. Cuando llevamos las fotos dibujadas en el cuaderno, nos es más fácil enseñar a los modelos lo que queremos hacer y ellos también saben cómo va a ir la sesión. Así no pierdes tiempo.

La búsqueda​

También es importante que en este momento de la planificación hagamos una pequeña búsqueda de aquello que se vende más acerca de lo que queremos hacer. De esta forma veremos qué se ha hecho referente al tema y podemos intentar ser más creativos o mejorar lo que ya existe.

Ya hemos dicho varias veces que hay mucha competencia. Mirar lo que hacen los competidores ayuda a mejorar nuestras fotografías y sesiones.

La sesión: Qué, Quién, Dónde y Cómo

Una vez tenemos claro todo lo que queremos hacer, cómo lo vamos a hacer, con quien lo vamos a hacer y la ubicación, es hora de divertirnos. Está claro que con la planificación todo saldrá mejor y tendríamos que sacar las fotografías previamente pensadas. Además, siempre se terminan sacando algunas fotografías esporádicas que se nos pueden ocurrir en el momento por las circunstancias que se den durante la sesión. ¡No están de más!

Planificar una sesión no significa que no podamos improvisar, sino que trabajaremos con parámetros claros y sabiendo qué objetivos tenemos. ¡Todo lo que venga de más y entre dentro de nuestro tiempo para hacer la sesión es bienvenido!